Las
fichas son un instrumento útil para registrar los datos más importantes de las
lecturas que se realizan. En los cursos de la ESO intentaremos que los alumnos aprendan a
realizarlas, pero también que les sirvan para reflejar las impresiones o
sensaciones que tengan ante un libro.
Pueden
utilizarse diferentes modelos, pero deben siempre contener datos de
identificación tales como el título, el nombre del autor, la editorial o la
fecha de publicación.
Recordemos
que la ficha bibliográfica en la materia de lengua castellana no es solo un
instrumento de clasificación o de trabajo, sino que también es un modelo de
texto. Sirve para registrar los libros o documentos que se leen o se consultan,
facilita la localización en una biblioteca y, si se realizan para un trabajo de
investigación, facilitan la elaboración de la bibliografía final.
A
continuación podemos ver un ejemplo de elaboración de ficha bibliográfica:
AUTOR: Primero colocaremos el
apellido y después el nombre
TÍTULO: Aparece subrayado si la
ficha está escrita a mano y en cursiva si se realiza con ordenador. Si se
trata de una traducción añadiremos el título original.
EDITORIAL: Se apuntará el
nombre de la misma, la fecha de la edición (entre paréntesis, si se conoce y
fuera pertinente, también la fecha de la primera edición) y, si puede ser, el
lugar de esa edición.
GÉNERO: Sobre todo si se trata
de una obra literaria.
TEMA CENTRAL: Sobre todo si se
trata de una ficha de recuerdo. También puede realizarse un resumen.
OTROS: Podemos recoger alguna
cita, opiniones sobre la obra, destacar algún apartado de la misma, realizar
anotaciones, etc.
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