(A partir de la
sintaxis de César Hernández Alonso)
Aditivos
Unen
dos oraciones o unidades textuales, añadiendo así una parte del contenido al
mensaje de los primeros elementos conectados. Entre las dos oraciones debe
haber cierta compatibilidad de contenidos.
Enlaces
aditivos son por ejemplo más aún,
incluso, asimismo, además, encima, aún más, todavía más o también.
Por
otra parte, hay unas variantes no lexicalizadas que actúan de manera semejante:
por lo demás, es más, a propósito o por cierto.
Entre
estos enlaces hay dos subgrupos que, además de conectar aditivamente, expresan
orden o distribución del mensaje en partes (por
una parte… por otra; en primer lugar,…, en segundo,…); y adición de una
fase terminal del mensaje, una especie de epifonema o conclusión (en fin, por último, en conclusión, en
resumen, en suma, para concluir, etc.)
De oposición
Conectan
dos oraciones o dos parágrafos que guardan entre sí una relación opositiva pura
o restrictiva o excluyente.
Como
enlaces de oposición podemos señalar por
el contrario, por contra, en cambio, no obstante, sin embargo, antes bien,
ahora bien, de todas maneras, aun así, con todo (y con eso),…
Hay
otras formas no lexicalizadas totalmente, que pueden desempeñar el mismo papel,
como en caso contrario, de otro modo, así
y todo, a pesar de todo o lo cierto
es que…
De causalidad
Entre
estos encontramos por ejemplo: pues, por
consiguiente, por tanto, así pues, pues bien o consecuentemente.
Entre
los parcialmente lexicalizados podemos señalar en tal caso, de modo que, de este modo, de otro modo y a causa de esto.
De coincidencia
Entre
estos enlaces podemos señalar cuatro grupos:
-
De equivalencia o de identidad: el segundo
elemento enlazado amplifica el contenido del primero, sin que denotativamente
aporte nada nuevo (como es decir, o sea,
esto es, a saber, viene a decir y en
otras palabras).
-
De inclusión: conectan una oración o parágrafo a
otra u otro anterior como componente amplificativo, preferentemente parcial de
esta o este (por ejemplo, así o concretamente).
-
De equiparación amplificativa: se trata de
enlaces como de la misma manera, así,
igualmente o sobre esto. Es una
mezcla de la relación de equivalencia y la aditiva, a la que se añade ese valor
contrastivo.
-
Coordinación y yuxtaposición: y, o bien, pero, aunque, entre otros.
Concatenadores deícticos
Dan
cohesión al texto y enlazan enunciados de unidades oracionales y
supraoracionales, de manera semejante a como lo hacen con las cláusulas.
Debemos
distinguir entre deixis ad oculos,
que sirve para situar un objeto, un ser o un acontecimiento respecto de uno de
los ejes de la comunicación, en la órbita del emisor, del receptor o fuera de
ellas; y deixis contextual, de
índole metalingüística, pues señala elementos o parte del texto. Esta, a su
vez, puede ser anafórica, con
remisión a algo precedente, o catafórica,
que suele tener el valor de presentadora.
Por
otra parte, debemos distinguir la deixis
personal, representada básicamente por los pronombres personales y los
de su entorno (posesivos, demostrativos, etc.), la deixis temporal (ahora, entonces, etc.) y la deixis espacial (allí, aquí,…).
Entre
los deícticos podemos distinguir, de acuerdo con la clasificación de Lenz,
entre los subjetivos,
coincidentes con los que se apoyan en uno de los ejes del proceso comunicativo,
y los objetivos, que tienen
otro punto de referencia. Todos ellos, desde un punto de vista semántico,
pueden ser dinámicos o estativos.
Si
nos centramos en los deícticos
anafóricos que funcionan como elementos de enlace interoracional,
podremos realizar la siguiente clasificación:
a)
Unos presentan una relación de causalidad, deductiva de lo precedente: por ello, por eso, por lo cual, de ahí que,
por ende, a causa de esto, por tal motivo, en este caso, entonces,…
b)
Otros presentan una relación de equivalencia: esto
es o lo que quiere decir, por ejemplo. Algunos
de ellos son distribuidores
del contenido u ordenadores del discurso (en
este caso… en otro, esto… eso, lo de más allá).
c)
Un grupo, encabezador de oración o parágrafo, puede
enlazar aditivamente o amplificar, con una marca temporal (al día siguiente, poco antes, años después, en aquel momento, y ahora,
y después, como dijimos antes,…). Es frecuente que las oraciones o
parágrafos encabezados por estos elementos expresen el marco temporal o el
espacial del otro segmento expreso.
d)
Los catafóricos
expresan una anticipación del contenido: como
se verá, según veremos, las razones son las siguientes,…
Son
elementos no desemantizados, y en muchos casos bifuncionales; además de enlazar
oraciones o unidades superiores a ella, pueden ocupar una función dentro del dictum, en alguna de las
cláusulas que forman la oración.
La
red de deícticos en un texto es uno de los fenómenos que le dan coherencia.
La
deixis temporal siempre ha de relacionarse estrechamente con las marcas de
tiempo y aspecto de los verbos, entre otros elementos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario